PLAN DE INFANCIA Y ADOLESCENCIA

En los últimos años, la crisis económica ha multiplicado exponencialmente sus devastadores efectos en la sociedad española como consecuencia de las políticas de austeridad y el desmantelamiento de los servicios públicos. Especialmente preocupante es la situación de la infancia en nuestro país y, sobre todo, la situación que viven los niños y las niñas de nuestra ciudad, que se sitúan dentro de los índices de más pobreza de España.

Los retrocesos en el sistema de protección social; el incremento del desempleo, el recorte a la prestación por desempleo; la precariedad laboral; la quiebra de la universalidad en el acceso a la sanidad; los recortes en educación y en los servicios sociales, han empobrecido a miles de familias. Cuando en ellas conviven menores, son ellos los que más sufren, ya que a los padecimientos inmediatos hay que añadir las secuelas que soportarán en el futuro como consecuencia de haber vivido una infancia con privaciones.

Numerosos organismos internacionales han llamado la atención sobre la situación de la infancia en estos momentos de recesión económica, y muchos de ellos han mostrado su preocupación por lo que está ocurriendo en España. Para los socialistas, atender los compromisos y recomendaciones internacionales es una obligación. Cuando éstos afectan a los derechos de la infancia deberían ser una prioridad para el Gobierno y para el país.

Por ello, y con motivo del Día Mundial de la Infancia que se celebró el 20 de noviembre, os hacemos llegar nuestro decálogo de intenciones y nuestro compromiso de conseguir una ciudad digna y, además, volviendo a insistir en la importancia de coordinar actuaciones comunes, reiteramos nuestra propuesta para la creación de un Plan Integral de Atención a la Infancia y Adolescencia con el objetivo de impulsar un nuevo marco de acción. Ceuta no puede quedar al margen de las políticas estatales y acuerdos internacionales y carecer, a su vez, de un Plan Integral de Infancia y Adolescencia que vele por la protección social, económica y jurídica de esta población.

Los y las socialistas de Ceuta somos conscientes del esfuerzo que se hace en ocasiones, por parte de la Administración, para atender estas demandas, pero independientemente de las distintas actuaciones que se han ido desarrollando a lo largo de estos años, Ceuta necesita un proceso de reflexión, coordinación y ejecución que plasme en un documento una serie de estrategias, a corto y medio plazo, para el logro de objetivos, pautas y modos de acción.

Actualmente, Ceuta tiene una Comisión de Atención a la Infancia a la que le corresponde declarar la situación de desamparo de los/las menores, asumir la guarda o tutela, autorizar la constitución del acogimiento familiar o adopción, así como adoptar cuantas medidas sean necesarias para garantizar la seguridad y protección de los/las menores en el ámbito de competencias que corresponden a la Ciudad Autónoma, a propuesta de la Jefatura del Área de Menores. Esta Comisión, que carece de competencias más amplias y generales, no puede ser el único organismo de la Ciudad en temas de menores, además, la existencia de un Reglamento no puede servir de excusa al Gobierno para limitar la posibilidad de articular un eje vertebrador que coordine las distintas Administraciones Públicas y de participación a Entidades, Asociaciones y Organizaciones de Ceuta.

Asegurar que la infancia y la adolescencia tengan garantizados sus derechos, sea sujeto activo de su propio desarrollo, reciba el apoyo y la protección de su familia, de la sociedad y de las instituciones en igualdad de oportunidades y de acceso a salud, educación, servicios sociales, participación y ocio, independientemente del lugar donde resida, su condición de género, origen cultural o discapacidad, debe ser nuestra prioridad, por eso queremos desarrollar un Plan Integral para la Infancia y Adolescencia, con la participación de instituciones, entidades y agentes, que comprometa a cubrir estas necesidades de una forma flexible, evaluable, ágil y adaptativa.

Además, y con intención de agilizar el procedimiento y facilitar la comunicación, desde el Grupo Parlamentario Socialista vemos necesario habilitar un nuevo mecanismo que optimice y ejecute el Plan.

A la vista de los argumentos expuestos, proponemos al Pleno de la Asamblea, la adopción del siguiente acuerdo:

- Instar al Gobierno de la Ciudad a la creación de un Plan Integral de Infancia y Adolescencia que vele por la protección social, económica y jurídica de esta población, trabajando en la consecución del desarrollo integral en aspectos fundamentales como el ocio, la familia, la escuela, la sociedad, etc.

- Solicitar al Gobierno de la Ciudad la creación de un Consejo de la Infancia y Adolescencia que sirva para la articulación y ejecución del Plan.

- Reclamar al Gobierno de la Ciudad a firmar un decálogo de intenciones para la protección de la infancia:

1.- Garantizar los derechos de la infancia a través de un pacto político, ya que consideramos que los derechos del niño deben ser una prioridad en todas las políticas públicas.

2.- Blindar la inversión en infancia, protegiendo las partidas presupuestarias fundamentales destinadas a la infancia.

3.- Definir objetivos compartidos por todos los grupos políticos y coordinados mediante un plan estratégico de infancia y adolescencia, mediante la aprobación de un plan de lucha contra la pobreza y la exclusión social de la infancia.

4.- Que ningún niño viva en familias sin ingresos ni por debajo del umbral de la pobreza, como horizonte, creando un nuevo subsidio para familias con hijos cuyos progenitores estén en desempleo.

5.- Reforzar las prestaciones familiares, apoyando incondicionalmente a las familias numerosas, monoparentales y aquellas cuyos progenitores están desempleados.

6.- Garantizar que el Salario Mínimo Interprofesional permita a los trabajadores y a sus familias gozar de condiciones de vida dignas y que se ajuste periódicamente al coste de la vida.

7.- Garantizar el derecho a la Educación de calidad y en condiciones de igualdad.

8.- Recuperar la etapa educativa de 0 a 3 años como objetivo prioritario.

9.- Evitar los desahucios en familias con hijos, así como asegurar un alojamiento alternativo, adecuado y asequible en los casos que en los que se llevaran a cabo.

10.- Garantizar la atención a la salud integral de todos los niños y las niñas.